Cada vez que tenemos la necesidad de acudir a un profesional sanitario, lo hacemos con preocupación y angustia por el estado de salud en el que nos encontramos. Y más aún en casos como, por ejemplo, en los que se decide optar por un centro médico especializado para llevar a cabo la interrupción de un embarazo.
En ese caso, si hay algo realmente importante, además de que se esté segura del paso que se va a dar, es que se tenga plena confianza por parte del paciente en el médico. Para conseguirlo este profesional del ámbito de la salud debe apostar por un servicio sustentado en las siguientes características:
- Capacidad de escucha: Es vital que el médico otorgue a su paciente el tiempo que necesite para que pueda expresar lo que le sucede y la medida que desea tomar a la hora de interrumpir su estado de gestación.
- Trato cercano: No menos importante para que la mujer que acude al centro pueda tranquilizarse, en la medida de lo posible, es que el profesional sanitario se muestre accesible y comprensible. Pero no sólo eso sino también que le dé respuestas a todas las preguntas que aquella necesita resolver acerca del procedimiento al que se va a someter o de las consecuencias que este puede ocasionarle.
- Confidencialidad: Absolutamente imprescindible para que la paciente deposite su confianza en el médico es que este mantenga en absoluto secreto todo lo que concierne a su paso por el centro.
- Cercanía: En muchas ocasiones quienes acuden a un centro médico critican el servicio absolutamente despersonalizado que se les ofrece. Por eso, se hace vital que el doctor muestre su faceta humana al comprender la situación tan difícil que es para la mujer el someterse a un aborto e intente brindarle una atención cercana y amable.
